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Boohoo, el minorista de moda rápida del Reino Unido, ha promovido a un empleado interno a director ejecutivo del grupo, en un desaire al magnate de ropa deportiva Mike Ashley, quien había exigido ser nombrado director ejecutivo del grupo.
Dan Finley, que dirige Debenhams, propiedad de Boohoo, reemplazará al saliente director ejecutivo del Grupo Boohoo, John Lyttle, “con efecto inmediato”, anunció Boohoo el viernes.
La decisión se produce después de que Frasers Group de Ashley, el mayor accionista de Boohoo, acusara a Boohoo de gestionar mal sus negocios y destruir el valor para los accionistas, y exigiera que Ashley fuera nombrado director ejecutivo.
Frasers dijo en una carta abierta el mes pasado que “no hay un candidato más idóneo para director ejecutivo que tenga la experiencia y habilidades de Ashley y que esté en posición de reemplazar a Lyttle lo antes posible”. El minorista, que posee aproximadamente el 27 por ciento de Boohoo, solicitó una junta extraordinaria con sus inversores y criticó los términos de una reciente refinanciación de deuda de £222 millones.
El viernes, Boohoo dijo que respondería “en su momento” y nuevamente instó a los accionistas “no tomar medidas” en respuesta a las propuestas de Frasers. Las acciones de Boohoo subieron un 2.5 por ciento en las primeras operaciones en Londres.
La semana pasada, el minorista dijo que necesitaba “proteger su posición comercial”, en respuesta a las solicitudes de Frasers, debido a su participación en el minorista en línea rival Asos, y calificó algunas críticas de Frasers de “inexactas e injustas”.
Frasers, anteriormente Sports Direct, posee una participación del 23.6 por ciento en Asos, que Boohoo dijo que necesitaba “considerar cuidadosamente”, señalando que tanto Frasers como Asos compiten en mercados similares al suyo.
Alistair McGeorge, presidente adjunto de Boohoo, dijo que la decisión de nombrar a Finley, quien anteriormente fue director en JD Sports, fue unánime, y lo calificó como un “líder excepcional”.
Lyttle, quien estuvo al mando durante cinco años, seguirá estando disponible para Finley y el grupo para garantizar una transición sin problemas, afirmó la empresa.
Ashley ha chocado con Mahmud Kamani, presidente ejecutivo y cofundador de Boohoo, en los últimos meses, sobre la trayectoria de Boohoo.
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Clive Black, jefe de investigación de consumidores en Shore Capital, dijo: “Se tiene la sensación de que los intercambios entre Boohoo y elementos de los equipos de Frasers pueden haber sido los más coloridos hasta la fecha, pero esperamos ver si habrá más golpes contundentes por venir”.
Las acciones de Boohoo han caído más del 90 por ciento desde su punto máximo a mediados de 2020, cuando el minorista fue impulsado por un auge en las compras en línea durante la pandemia. Desde entonces, ha tenido que lidiar con una demanda moderada y costos diarios más altos debido a factores como devoluciones, así como una mayor competencia de rivales como Shein y Temu.
Frasers perdió previamente una batalla con Boohoo por el control de Debenhams después del colapso de la tienda por departamentos en 2019. La compañía también se interpuso en el acuerdo de Boohoo para comprar a la rival de moda en dificultades Missguided en 2022, y compró al competidor I Saw It First, fundado por el hermano de Kamani.
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