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La correduría de buques con sede en Londres, Braemar, cerró con una caída del 6 por ciento el jueves, la mayor caída en un solo día en más de un año, después de que el Financial Times informara sobre su participación en la venta de nueve petroleros que se han unido a la “flota oculta” de Rusia.
Las acciones de Braemar cerraron el día a 278p, el mínimo desde mayo, y bajaron otro 5 por ciento a 264 el viernes.
Londres ha sido un centro global de la industria marítima durante siglos, y Braemar, fundada en 1982, es una de las corredurías líderes del sector, emparejando compradores y vendedores de buques a cambio de un porcentaje del precio de compra.
Desde que se impusieron las primeras restricciones occidentales a las exportaciones de petróleo rusas en diciembre de 2022, Moscú ha reunido una llamada flota oculta de más de 400 buques que actualmente transportan alrededor de 4 millones de barriles de petróleo al día más allá del alcance de las sanciones y generan miles de millones de dólares al año en ingresos adicionales para su guerra en Ucrania.
La mayoría de esos petroleros fueron comprados a vendedores occidentales, pero el uso de estructuras de propiedad offshore ha dificultado que los funcionarios occidentales identifiquen cómo se adquirieron los buques y quién es su propietario en la actualidad.
El FT informó el jueves que al menos 25 de los buques de la flota oculta fueron adquiridos por un contador británico en nombre de Eiger Shipping DMCC, el brazo naviero con sede en Dubái de Lukoil, el segundo mayor productor de petróleo de Rusia. Eiger financió las adquisiciones pagando por adelantado para fletar los buques, informó el FT.
Los abogados del contador y otra persona familiarizada con el asunto, le dijeron al FT que Braemar estaba totalmente al tanto de que los buques estaban siendo adquiridos para, y financiados por, Eiger.
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Braemar confirmó que había servido como corredor en al menos nueve de las compras, pero se negó a comentar sobre su conocimiento de la participación de Eiger.
“Para cada transacción que Braemar considere llevar a cabo, se realiza toda la debida diligencia con verificaciones de conocimiento del cliente, legal, de cumplimiento y adherencia regulatoria”, dijo en un comunicado. Braemar dijo el viernes que no tenía más comentarios.
No se alega que las transacciones hayan quebrantado ninguna ley. Aunque Lukoil ha estado bajo sanciones estadounidenses desde 2014, ni Eiger Shipping DMCC ni su propietario en Dubái, Litasco Middle East DMCC, son entidades afectadas por sanciones. Las empresas con sede en Dubái tampoco están obligadas a cumplir con las restricciones de occidente si no utilizan financiación o servicios del G7.
Sin embargo, individuos y empresas que han ayudado a armar y operar la flota oculta están cada vez más en la mira de los gobiernos occidentales. Al menos siete de los 25 buques originalmente adquiridos por el contador británico han sido sancionados por el Reino Unido o la UE, al igual que dos empresas que anteriormente gestionaban muchos de los buques.
En un llamado a la acción en julio, 44 líderes europeos, incluido el Primer Ministro del Reino Unido, Sir Keir Starmer, se comprometieron a apuntar a los “barcos y facilitadores” de la flota oculta y pidieron el apoyo de la industria marítima, incluidos los corredores de buques.