Según el grupo de investigación Daxue Consulting (GEORGES GOBET), China importó más brandy que cualquier otro espiritu en 2022, la mayoría de él de Francia. China anunció el martes que impondría aranceles provisionales sobre el brandy importado de la Unión Europea, marcando el último enfrentamiento en una disputa comercial en escalada entre Pekín y Bruselas. Los dos son socios económicos importantes pero han chocado en los últimos meses por los generosos subsidios de Pekín a sus industrias nacionales. Bruselas argumenta que el apoyo socava el principio de competencia libre y ayuda a reducir los precios de las exportaciones chinas, perjudicando a los competidores europeos. Pekín ha negado las acusaciones y acusa a Bruselas de proteccionismo. China lanzó una investigación este año sobre el brandy de la UE, meses después de que el bloque llevó a cabo una investigación sobre los subsidios chinos a los vehículos eléctricos.