Los coches se ven alineados en la terminal de vehículos en el puerto de contenedores de Bremerhaven. El sector automovilístico en Europa está enfrentando una crisis. En lugar de expandirse rápidamente, el mercado de vehículos eléctricos (EVs) se está estancando, socavando los ambiciosos objetivos de la Unión Europea de poner fin a las ventas de nuevos coches diésel y de gasolina para 2035. Ingo Wagner/dpa
China anunció el martes que impuso aranceles provisionales al brandy europeo, después de que el bloque recientemente aprobara nuevos aranceles a la importación de coches eléctricos desde China.
El Ministerio de Comercio de Beijing dijo que a partir de este viernes, a los importadores de ciertas variedades de brandy se les requerirá depositar una cantidad no especificada con la aduana china.
Esto se da en medio de un conflicto comercial con la Unión Europea y probablemente responda a la reciente decisión de la UE de proceder con aranceles a los coches eléctricos chinos. La Comisión Europea tiene el poder de imponer aranceles de hasta el 35.3%. Estos se aplicarán a partir de noviembre.
Beijing criticó las medidas de la UE como proteccionistas, acusando a Bruselas de ignorar los hechos y violar las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
A pesar de las crecientes tensiones comerciales, Beijing dijo que sigue buscando una solución negociada.
Mientras tanto, en China se están realizando investigaciones adicionales sobre productos de la UE. En julio, el Ministerio de Comercio inició una investigación sobre el cerdo de la UE, y las investigaciones antidumping están en curso para ciertos productos lácteos.
La comisión impugnará los aranceles provisionales al brandy europeo en la Organización Mundial del Comercio, dijo Olof Gill, un portavoz del brazo ejecutivo de la UE, en X.
“Creemos que estas medidas son infundadas y estamos determinados a defender a la industria de la UE contra el abuso de los instrumentos de defensa comercial”, dijo.
El Comisario de Economía de la UE, Paolo Gentiloni, dijo que la UE impuso aranceles a los coches eléctricos chinos después de “una seria investigación sobre los riesgos de sobreproducción en algunos sectores”.
Hablando en una conferencia de prensa en Luxemburgo después de una reunión de ministros de finanzas de la UE, Gentiloni describió las acciones de la UE como proporcionadas, y por lo tanto no había motivo para que Beijing retaliara.