El juez el mes pasado prohibió la difusión de tales imágenes al público y a la prensa por considerar que eran “impactantes e indecentes”. Sin embargo, decidió levantar las restricciones después de que los abogados de la Sra. Pelicot pidieran que el juicio fuera público. “Si estas mismas audiencias, a través de su publicidad, ayudan a prevenir que otras mujeres tengan que pasar por esto, entonces ella encontrará sentido en su sufrimiento”, dijo uno de los abogados de la Sra. Pelicot, Stéphane Babonneau. El Sr. Babonneau calificó la decisión como “una victoria en una lucha que no debería haberse librado”, y agregó que las víctimas de violación durante décadas en la ley francesa habían tenido derecho a decidir si los procedimientos debían ser públicos. La prensa francesa también hizo campaña para que se revirtiera la decisión. La asociación de prensa judicial (APJ) advirtió de un “grave ataque” a la libertad de información. La proyección de pruebas en video fue firmemente rechazada por abogados de algunos de los 50 coacusados acusados de violar a la exmujer del Sr. Pelicot. “La justicia no necesita eso para proceder, ¿cuál es el punto de estas proyecciones repulsivas?” dijo el abogado Olivier Lantelme.
