En el frente en el este de Ucrania, las tropas rusas continúan presionando duro y el jefe regional de Donetsk, Vadym Filashkin, ha dicho que casi han llegado al centro de la ciudad de Vuhledar.
Se dice que solo quedan 107 personas en la ciudad bombardeada, con los niños ya evacuados y la ayuda humanitaria “casi imposible” de entregar, según Filashkin.
Como parte del Día de los Defensores, el presidente Volodymyr Zelensky rindió homenaje a los que habían muerto en la lucha, diciendo: “Se sacrifican para que Ucrania no tenga que ser sacrificada”.
La pareja de Yuliya, Bogdan, sirvió como médico del ejército tratando a personas durante el devastador asedio de Mariupol antes de ser capturado por tropas rusas.
“Tengo una hija, tiene cinco años, así que creo que me ayuda mucho porque ella es mi sentido ahora de vivir. Necesito ser fuerte. Y necesito ser ahora una madre y un padre en una persona”
Bogdan fue uno de los docenas que murieron en la explosión de julio de 2022 en la prisión de Olenivka, que Kyiv cree que fue un intento deliberado de Rusia de destruir pruebas de crímenes de guerra, aunque Moscú culpó a los misiles ucranianos.
Para innumerables familias ucranianas, el recuerdo es un acto privado, así como público.
Yuliya dice que quiere que su hija recuerde a su padre: “Lo que hizo por nosotros y todo lo que tenemos ahora es gracias a él. Nos estaba protegiendo.”