En un discurso el lunes, el líder adjunto de Hezbollah, Naim Qassam, describió los actuales ataques con cohetes, drones y misiles contra Israel como “lo mínimo necesario” y dijo que “saldrían victoriosos” después de una ofensiva terrestre israelí.
El grupo aún tiene miles de combatientes, muchos de ellos veteranos de la guerra civil vecina de Siria, así como un gran arsenal de misiles, muchos de ellos de largo alcance y de precisión, que podrían alcanzar Tel Aviv y otras ciudades.
El Corresponsal de Seguridad de la BBC, Frank Gardner, dice que habrá presión dentro de sus filas para usar esos misiles antes de que sean destruidos, pero que un ataque masivo contra Israel que mate a civiles podría desencadenar una respuesta devastadora.
El asesinato de Nasrallah también fue un gran golpe para Irán, golpeando en el corazón de la red regional de milicias aliadas y fuertemente armadas conocida como el “Eje de la Resistencia” que es clave para su estrategia disuasoria contra Israel.
El domingo, aviones israelíes atacaron infraestructuras en la ciudad portuaria del Mar Rojo de Hudaydah en Yemen en respuesta a recientes ataques con misiles y drones del movimiento Hutí respaldado por Irán.
Irán podría pedir a los hutíes y otros grupos que intensifiquen sus ataques tanto contra Israel como contra bases estadounidenses en la región. Pero sea cual sea la respuesta que elija, es probable que la calibre para que esté justo por debajo de desencadenar una guerra regional que involucre a los Estados Unidos y que no podría ganar.
¿Qué podrían hacer a continuación Hezbollah, Israel e Irán?
Irán advierte que la muerte del líder de Hezbollah ‘no quedará impune’.’
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