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Starbucks ha otorgado a su nuevo director ejecutivo Brian Niccol efectivo y acciones potencialmente por un valor de más de $100 millones, uno de los paquetes de contratación más grandes en la historia corporativa de EE. UU. y cuatro veces más grande que el acuerdo de contratación ofrecido a su predecesor destituido.
Si se paga en su totalidad, el paquete —revelado en una presentación ante la SEC el miércoles— convertiría a Niccol en uno de los CEO mejor pagados de Estados Unidos. El contrato tendría un valor de $113 millones si alcanza los objetivos que Starbucks le ha fijado.
Starbucks nombró a Niccol como su cuarto director en menos de tres años el martes, después de la sorpresiva destitución del CEO Laxman Narasimhan, el exdirector ejecutivo de Reckitt Benckiser.
Niccol llegará a Starbucks el próximo mes procedente de la cadena de burritos Chipotle Mexican Grill, donde desde 2018 lideró una revitalización de su negocio y reputación después de una serie de escándalos de seguridad alimentaria. Las acciones de Chipotle aumentaron casi un 800 por ciento durante su mandato.
Para empezar, Niccol recibirá un bono en efectivo de $10 millones por adelantado y otros $75 millones en subvenciones de acciones diseñadas para pagarse con el tiempo, para compensarlo por los bonos y acciones no adquiridas que dejó en Chipotle.
De manera anual, Niccol ganará un salario de $1.6 millones más un bono en efectivo objetivo por un valor de aproximadamente $3.6 millones según el desempeño de Starbucks. Además de una subvención de equidad a largo plazo con un valor objetivo anual de $23 millones, que se pagará durante varios años.
“La disposición de la junta (de Starbucks) de pagar un precio tan alto es un testimonio de la fe que tienen en Niccol”, dijo Ben Silverman, vicepresidente de investigación en Verity, una empresa de análisis. “Pero él tendrá que demostrar que lo vale, ya que su compensación anual es aproximadamente un 75 por ciento más alta que la de su predecesor.”
El año pasado, la paga total de Niccol en Chipotle fue de $22.5 millones, mientras que el valor de sus ganancias no realizadas de subvenciones de incentivos de equidad pasadas superaba los $82 millones, según una presentación ante la SEC.
El paquete de Starbucks viene con un beneficio inusual: Niccol no estaría obligado a mudarse a la sede en Seattle, según la presentación. En su lugar, la empresa establecerá una “pequeña oficina remota” en Newport Beach, California —la ciudad a la que Niccol había trasladado la sede de Chipotle desde Denver— además de pagar por un asistente de su elección.
Solamente cinco ejecutivos más recibieron paquetes de pago por un valor superior a $100 millones en 2023, según un informe de junio de Equilar, una empresa de datos de pago, de las mayores empresas de EE. UU. por ingresos. Tales contratos son particularmente inusuales fuera de los sectores financiero y tecnológico.
La remuneración anual objetivo de Niccol sería un 83 por ciento más alta que la mediana objetivo en otros grupos de restaurantes del S&P 500, como Chipotle, Darden, Yum Brands y McDonald’s, dijo Courtney Yu, directora de investigación de Equilar.
“Brian Niccol ha demostrado ser uno de los líderes más efectivos de nuestra industria, generando retornos financieros significativos durante muchos años”, dijo Starbucks, agregando que su salario estaba “directamente relacionado con el desempeño de la empresa y el éxito compartido de todos nuestros grupos de interés”.
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Cuando Starbucks contrató a Narasimhan de la empresa de productos de consumo con sede en el Reino Unido, Reckitt, en 2022, se le ofreció un paquete valorado en más de $28 millones. Esto incluía un salario base de $1.3 millones, bonos en efectivo anuales por un valor de hasta $2.6 millones y premios de equidad anuales con un valor objetivo de $13.6 millones.
Además, Starbucks acordó pagar a Narasimhan un bono de firma de $1.6 millones en efectivo y $9.25 millones en acciones para compensarlo por los incentivos que renunció al dejar Reckitt.
Starbucks no detalló los términos del pago por despido de Narasimhan.
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