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Por Nidal al-Mughrabi
EL CAIRO (Reuters) – Israel amplió las órdenes de evacuación en Khan Younis en el sur de la Franja de Gaza durante la noche, obligando a decenas de miles de residentes palestinos y familias desplazadas a abandonar en la oscuridad mientras las explosiones de los bombardeos de tanques retumbaban a su alrededor.
El ejército israelí dijo que estaba atacando a militantes del grupo Hamas -que administraba Gaza antes de la guerra- que estaban utilizando esas áreas para llevar a cabo ataques y lanzar cohetes.
El sábado, un ataque aéreo israelí en una escuela donde se refugiaban palestinos desplazados en la ciudad de Gaza mató al menos a 90 personas, según el servicio de defensa civil, provocando una gran indignación internacional.
El ejército israelí dijo que había atacado un puesto de mando de militantes de Hamas y Jihad Islámica, una acusación que ambos grupos rechazaron como pretexto, y mató a 19 militantes.
En Khan Younis, en el sur de la Franja de Gaza, la instrucción de evacuación cubría los distritos en el centro, este y oeste, convirtiéndose en una de las órdenes de evacuación más grandes en el conflicto de 10 meses, dos días después de que los tanques regresaran al este de la ciudad.
El anuncio se publicó en X y en mensajes de texto y audio a los teléfonos de los residentes: “Por su propia seguridad, deben evacuar inmediatamente a la zona humanitaria recién creada. El área en la que se encuentran se considera una zona de combate peligrosa”.
Philippe Lazzarini, jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos UNRWA, dijo que la gente en Gaza está atrapada y no tiene a dónde ir.
“Algunos solo pueden llevar a sus hijos consigo, otros llevan toda su vida en una pequeña bolsa. Se dirigen a lugares abarrotados donde los refugios ya están desbordados de familias. Lo han perdido todo y necesitan todo”, dijo.
El ejército israelí dijo que había golpeado alrededor de 30 objetivos militares de Hamas en las 24 horas anteriores, incluyendo estructuras militares, puestos de lanzamiento de misiles antitanque e instalaciones de almacenamiento de armas.
Ala Qasam, el ala armada de la Jihad Islámica, dijo que los combatientes lanzaron bombas de mortero contra las fuerzas israelíes que se estaban concentrando en las áreas orientales de Khan Younis.
Más tarde, un ataque aéreo israelí cerca del mercado de Khan Younis en el centro de la ciudad mató a cuatro palestinos e hirió a varios más, dijeron los médicos.
Columnas de humo se levantaron de áreas donde aviones israelíes realizaron ataques en las partes orientales y occidentales de la ciudad. Los residentes dijeron que dos edificios de varias plantas fueron bombardeados.
Casi 40,000 palestinos han muerto en la ofensiva israelí en Gaza desde que estalló la guerra en octubre pasado y la cifra sigue aumentando día a día, según el ministerio de salud de Gaza.
Los funcionarios de salud de Gaza dicen que la mayoría de las víctimas han sido civiles, pero Israel dice que al menos un tercio son combatientes. Israel dice que ha perdido 329 soldados en Gaza.
Israel comenzó su asalto a Gaza después de que los combatientes de Hamas irrumpieron en el sur de Israel el 7 de octubre, matando a 1,200 personas, en su mayoría civiles, y capturando a más de 250 rehenes, según las cifras israelíes.
DEZENAS DE MILES OBLIGADOS A IRSE DE NOCHE
Según las Naciones Unidas, la mayoría de los 2.3 millones de habitantes de Gaza han sido desplazados de sus hogares, mientras que su estrecha franja de tierra ha sido reducida en gran medida a un páramo de escombros.
Los funcionarios palestinos y de las Naciones Unidas dicen que no hay áreas seguras en el enclave. Áreas designadas como zonas humanitarias, como Al-Mawasi en el oeste de Khan Younis donde se enviaba a los residentes, han sido bombardeadas varias veces por las fuerzas israelíes.
Decenas de miles abandonaron sus hogares y refugios en medio de la noche, dirigiéndose hacia el oeste hacia Mawasi y hacia el norte hacia Deir Al-Balah, ya abarrotados con cientos de miles de personas desplazadas.
“Estamos agotados. Esta es la décima vez que yo y mi familia hemos tenido que abandonar nuestro refugio”, dijo Zaki Mohammad, de 28 años, que vive en el proyecto habitacional de Hamad en el oeste de Khan Younis, donde los ocupantes de dos edificios de varias plantas recibieron la orden de marcharse.
“La gente está llevando sus pertenencias, sus hijos, sus esperanzas y sus miedos y corriendo hacia lo desconocido, porque no hay un lugar seguro”, dijo a Reuters a través de una aplicación de chat. “Estamos corriendo de la muerte a la muerte”.
(Reporte y redacción de Nidal al-Mughrabi; Edición de Kevin Liffey y Angus MacSwan)
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