Los líderes de tres gobiernos militares de África Occidental tienen previsto reunirse por primera vez para consolidar una alianza creada frente a la oposición de países vecinos. Los soldados llegaron al poder en Mali, Burkina Faso y Níger en una serie de golpes de estado entre 2020 y 2023. Los tres países, que ahora forman la Alianza de Estados del Sahel, han sido afectados por la violencia yihadista, en parte una razón dada para los golpes de estado militares. En enero, todos anunciaron un plan para abandonar el bloque regional más amplio de la CEDEAO, que está celebrando su propia cumbre el domingo. En la reunión de este sábado en la capital nigerina, Niamey, se espera que los jefes de junta establezcan formalmente la alianza, conocida por su acrónimo en francés AES. El líder del golpe de estado de Níger, el general Abdourahmane Tchiani, es el anfitrión de las conversaciones, acompañado por el capitán Ibrahim Traoré de Burkina Faso y el coronel Assimi Goïta de Mali. La cooperación en materia de seguridad es una de las principales prioridades, pero AES también buscará establecer lazos económicos más estrechos, incluido el objetivo de crear una moneda común. Esto sería un rechazo al franco CFA respaldado por Francia, que se utiliza en muchos estados de la región. Los tres países han expulsado a los soldados franceses que estaban allí como parte de una misión antijihadista y se han vuelto hacia Rusia en busca de asistencia militar. Los llamados a una mayor soberanía y al rechazo de la antigua potencia colonial han sido una parte clave de la retórica de los líderes de la junta. Los países también han resistido los llamados de la CEDEAO para un retorno rápido al régimen civil. El capitán Traoré llegó a Niamey un día antes de la reunión y fue recibido con entusiasmo. Las imágenes de televisión muestran multitudes entusiastas ondeando banderas de Níger y Burkina Faso. Entre ellos se encontraba Sidi Mohamed, jefe del Consejo Nacional de Juventud. “Hoy, como africanos, estamos muy orgullosos de ver una cumbre donde es una cumbre africana, una cumbre donde los estados han decidido unir sus energías, unir sus fuerzas para crear una alianza para su desarrollo, sin actores extranjeros, sin contrapartes de los poderes que están acostumbrados a gobernarnos”, dijo a los periodistas. Se espera que el coronel Goïta llegue el sábado. Los presidentes del bloque más amplio de África Occidental tendrán la oportunidad de responder en una reunión de jefes de estado en la capital nigeriana, Abuja, el domingo. También tienen previsto anunciar la activación de una fuerza de intervención rápida para combatir la inseguridad regional. En la última década, el Sahel se ha convertido en un foco creciente de actividad de los militantes del Estado Islámico, creando inseguridad e inestabilidad. Hasta ahora, las juntas en Níger, Burkina Faso y Mali no han logrado sofocar la violencia.