La prominente activista palestina Ahed Tamimi y más de dos docenas de mujeres y niños fueron liberados de las cárceles israelíes la madrugada del jueves, informaron las autoridades israelíes y palestinas, en el último intercambio de rehenes en Gaza.
El ejército israelí arrestó a la Sra. Tamimi, de 22 años, en una redada antes del amanecer el 6 de noviembre bajo sospecha de incitar a la violencia y llamar a actividades terroristas, pero no presentó cargos en su contra durante las casi tres semanas que estuvo encarcelada en la prisión de Damon, cerca de Haifa, Israel.
Según su abogado, Mahmoud Hassan, la Sra. Tamimi fue golpeada durante su arresto y después de ser trasladada, en violación del derecho internacional, a la prisión en Israel desde Cisjordania ocupada.
El ejército intentó el domingo mantener a la Sra. Tamimi encarcelada en detención administrativa, lo que le habría permitido retenerla indefinidamente sin cargo ni juicio. Sin embargo, su nombre apareció más tarde en la lista del gobierno israelí de prisioneros y detenidos palestinos aprobados para ser liberados en el intercambio de rehenes. Su padre, el veterano líder de protestas Bassem Tamimi, también está encarcelado sin cargos.
La madre de la Sra. Tamimi, Nariman Tamimi, dijo el martes que su alegría por la perspectiva de la liberación de su hija fue empañada por las repetidas amenazas de violencia hechas contra la familia por colonos israelíes y por las fuerzas de ocupación, que han prohibido cualquier celebración y han disparado gases lacrimógenos para dispersar a las multitudes de palestinos que esperan reunirse con sus seres queridos y vecinos.
La gran cantidad de palestinos asesinados por las fuerzas israelíes desde el inicio de la guerra también ha dejado una marca indeleble, dijo Nariman Tamimi. Las autoridades de salud en Gaza han dicho que más de 13,000 personas han muerto en el enclave durante la guerra, y que se cree que miles más están atrapados bajo los escombros.
“Ella volvería después de la muerte de 17,000 personas. ¿Lo entiendes?”, dijo Nariman Tamimi. “Mi hija regresaría a mi regazo, pero hay mil madres que han perdido a sus hijos y mil familias que han perecido”.
“Desearía que no hubiera que haber tanta matanza para que mi hija fuera liberada”, agregó. “La realidad es que no debería haber sido encarcelada”.
El arresto de la Sra. Tamimi fue uno de los miles realizados por las fuerzas israelíes desde el 7 de octubre en una sangrienta represión en Cisjordania ocupada por lo que han dicho que son medidas contra el terrorismo. La cifra exacta de arrestos allí es motivo de controversia; el ejército israelí ha informado de más de 2,000, pero la comisión de asuntos de prisioneros de la Autoridad Palestina informa de casi 3,300.
Las fuerzas israelíes también han matado al menos a 225 palestinos en Cisjordania desde que comenzó la represión, lo que convierte a 2023 en el año más mortífero para los palestinos en ese lugar desde 2005, según la agencia humanitaria de las Naciones Unidas.
Un total de 30 palestinos, incluyendo a más de una docena de niños, fueron liberados la madrugada del jueves. Entre ellos se encontraba Suhair al-Barghouti, una mujer de 64 años que fue arrestada durante una redada en octubre y fue puesta en detención administrativa, donde se le ha negado el acceso a medicamentos para sus problemas de salud, según la Sociedad de Prisioneros Palestinos, un grupo de derechos no gubernamental.
La Sra. al-Barghouti proviene de una conocida familia de figuras de la resistencia palestina. Su esposo, Omar al-Barghouti, fue uno de los prisioneros palestinos con más años de servicio y pasó aproximadamente tres décadas entre rejas, gran parte de ellas bajo detención administrativa, antes de su muerte en 2021.
Sus hijos también han pasado años en detención israelí, y uno de ellos, Saleh al-Barghouti, fue tiroteado y asesinado por fuerzas de ocupación israelíes en 2018 después de ser acusado de abrir fuego contra colonos israelíes. Israel demolió su hogar familiar cerca de Ramala en 2019, según Wafa, la agencia de noticias de la Autoridad Palestina.
Sara Aridi contribuyó a esta noticia.