Los principales socios de coalición de Sudáfrica están en desacuerdo apenas unas semanas después de acordar compartir el poder, ya que el presidente Cyril Ramaphosa acusa al líder del Partido de la Alianza Democrática (DA), John Steenhuisen, de intentar crear un “gobierno paralelo” en violación de la constitución. Se dice que hizo la explosiva acusación en una carta a Steenhuisen el 25 de junio, que ha sido vista por los medios locales. Los mercados han caído con la noticia de la creciente división, en un momento en el que el Congreso Nacional Africano (ANC) y el DA supuestamente deberían estar repartiendo puestos en el gabinete y asentándose en el cargo. Cuando el ANC no logró obtener una mayoría absoluta en las elecciones del mes pasado, el principal partido de oposición DA acordó formar un gobierno de unidad nacional que mantendría al presidente Ramaphosa en el poder, a cambio de que los políticos del DA obtuvieran puestos en el gabinete. El ANC posteriormente también firmó un acuerdo de coalición con ocho partidos más pequeños, con Ramaphosa bajo presión para alojar al menos a algunos de ellos en su gabinete también. Ramaphosa escribió su carta furiosa después de dar al DA una oferta final de seis puestos en el gabinete, según informes de los medios locales. El DA luego exigió dos puestos adicionales, informa el sitio web News24, lo que enfureció a los altos cargos del ANC. La carta de Ramaphosa acusó al líder del DA de “mover los postes de gol” durante el proceso de negociación. También reprendió a la poderosa presidenta federal del DA, Helen Zille, por demandas que describió como “ofensivas, condescendientes y inconsistentes con la constitución”. Los medios locales también informan que Ramaphosa había incumplido su promesa de dar al DA el Ministerio de Comercio e Industria, un puesto clave para impulsar la economía de Sudáfrica en dificultades. En respuesta a este desaire, según News 24, los líderes del DA le dijeron a Ramaphosa que “el trato está fuera” a menos que se adhiera al acuerdo anterior que hicieron las dos partes. La disputa actual está causando consternación a medida que Sudáfrica entra en un territorio político desconocido. El ANC ha perdido su mayoría parlamentaria por primera vez desde que llegó al poder al final del sistema racista del apartheid en 1994. Obtuvo el 40% de los votos, mientras que el DA obtuvo el 22%. Inicialmente, los analistas le dijeron a la BBC que los dos lados podrían estar haciendo alardes mientras intentan obtener el mejor acuerdo para ellos mismos, pero la última correspondencia filtrada sugiere divisiones más profundas que algunos temen que podrían hacer naufragar el acuerdo de coalición que firmaron el 14 de junio. La noticia del posible colapso del acuerdo llevó a la moneda de Sudáfrica, el rand, a caer frente al dólar. El sector empresarial ha abogado firmemente por un acuerdo entre los dos partidos, creyendo que ayudaría a lograr estabilidad económica.