El líder del Partido de la Libertad de Inkatha (IFP) de Sudáfrica dice que su partido ha acordado formar parte de un gobierno de unidad nacional que incluye al Congreso Nacional Africano (ANC) y al mayor partido de oposición, la Alianza Democrática (DA).
Velenkosini Hlabisa dijo a los reporteros en una conferencia de prensa en Durban el miércoles: “Las únicas opciones eran ser parte del gobierno o parte de la oposición”.
“El pueblo sudafricano que votó dijo que los partidos políticos deben encontrar un terreno común”, dijo el Sr. Hlabisa.
Los sudafricanos estaban esperando ansiosamente saber quién formaría el próximo gobierno después de que el ANC perdiera su mayoría en las elecciones del mes pasado.
Esta es la primera indicación oficial de que se ha acordado un gobierno de unidad nacional, aunque la DA y el ANC aún no han comentado.
El ANC previamente dijo que quería formar un gobierno de unidad y se había comprometido con todos los partidos de oposición del país.
El nuevo parlamento debe ser juramentado el viernes, cuando se espera que elija a un presidente, por lo que el ANC esperaría haber acordado un trato para entonces. Insiste en que Cyril Ramaphosa debe seguir siendo líder del país.
El voto del ANC cayó por debajo del 50% por primera vez desde que Nelson Mandela los llevó a la victoria en 1994 y puso fin al sistema racista del apartheid, obligándolos a buscar socios de coalición.
El ANC obtuvo alrededor del 40% de los votos, con la centro derecha de la Alianza Democrática (DA) con el 22%, el partido MK del ex presidente Jacob Zuma con el 15% y los radicales Combatientes por la Libertad Económica con el 9%.
El IFP, que es un partido conservador con una sólida base zulú, obtuvo aproximadamente el 4% de los votos en las elecciones.
Muchos activistas del ANC preferirían hacer un trato con el EFF y el MK, que están dirigidos por antiguos altos funcionarios del ANC.
Sin embargo, tal coalición alarmaría a los inversores porque estos partidos favorecen la expropiación de tierras de propiedad blanca sin compensación y la nacionalización de las minas del país.
La comunidad empresarial preferiría una coalición entre el ANC y la DA.
Traer a otros partidos, como el IFP, ayudaría a desviar las críticas de que el liderazgo del ANC estaba “vendiéndose” al trabajar con la DA, vista por algunos sudafricanos como representante de la minoría blanca del país.
La DA se opone a dos de las políticas fundamentales del ANC: su programa de empoderamiento negro, que busca dar a los negros una participación en la economía tras su exclusión bajo el apartheid, y el Proyecto de Ley de Seguro Nacional de Salud (NHI), que promete atención médica universal para todos.
“Participaremos en el gobierno de unidad nacional por el bien de nuestro país y por el bien de nuestra gente, que quiere que la vida continúe con un gobierno estable que abordará sus desafíos”, dijo el Sr. Hlabisa.
El Sr. Hlabisa aseguró a los partidarios del IFP que el partido no “perdería su identidad” ya que han trabajado en un gobierno de coalición anteriormente.
Después de las históricas elecciones de 1994, el ANC de Mandela colaboró con sus antiguos enemigos en el Partido Nacional, que fue responsable de la implementación del apartheid, así como con el IFP, cuyos seguidores habían chocado frecuentemente con los activistas del ANC, lo que llevó a miles de muertes.
[BBC]
[Getty Images / BBC]
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