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Años antes de que ChatGPT de OpenAI mostrara al mundo lo que la tecnología de inteligencia artificial generativa podía hacer, el capitalista de riesgo Kai-Fu Lee vio el potencial disruptivo de la IA en el mercado laboral.
El presidente y director ejecutivo de Sinovation Ventures predijo en 2017 que la IA sería más grande que todas las revoluciones tecnológicas anteriores de la humanidad combinadas, incluyendo la electricidad y el internet, añadiendo que la IA es mucho más capaz que las personas.
“Estas son cosas que son sobrehumanas, y pensamos que esto estará en cada industria, probablemente reemplazará el 50% de los trabajos humanos, creará una gran cantidad de riqueza para la humanidad y erradicará la pobreza”, dijo Lee a CNBC en ese momento, pronosticando más tarde que sucedería en los próximos 10 años.
Avancemos siete años hasta el foro de innovación de Fortune en Hong Kong el pasado marzo, cuando se sentó con la editora jefa de Fortune Alyson Shontell.
Con el plazo de su predicción a solo tres años vista, ella le preguntó si todavía se mantenía, y él respondió: “En realidad es sorprendentemente precisa. Me criticaron por ser demasiado agresivo en 2017, 2018, 2019, y estaba un poco nervioso en ese momento. Pero cuando salió la generación IA, creo que todos están en la misma línea y creyendo que ese es el ritmo correcto”.
La IA probablemente eliminará los trabajos de cuello blanco más rápido que los de cuello azul, agregó Lee, describiéndolo como un problema muy significativo que algunos países han empezado a darse cuenta de que necesita ser abordado.
Al preguntarle qué deberían decirles los padres a sus hijos sobre sus futuras carreras, dijo que lo primero que la gente debería hacer es “dejar de lado la tontería de que los niños están usando ChatGPT para hacer trampas”.
El chatbot, que puede dar respuestas en lenguaje natural a consultas sobre una variedad de temas, es otra herramienta, al igual que Microsoft Word o Abode Photoshop, argumentó.
Cuando los niños crezcan, entren en la fuerza laboral y sean evaluados por su desempeño, los jefes mirarán el resultado final de su trabajo y no si utilizaron ChatGPT o la búsqueda en Google, continuó Lee.
“Necesitamos animar a las personas a aprovechar la IA y usar todas las herramientas para que puedan ser lo mejor que pueden ser”, dijo. “Además, es una gran guía sobre a qué cosas pueden aspirar y qué cosas no vale la pena seguir”.
Ciertamente, Lee sigue creyendo que hay algo único en nuestra humanidad, diciendo que las personas tienen almas mientras que las máquinas nunca lo tendrán. “Tenemos compasión y empatía. Tenemos emociones y la capacidad de amar. Tenemos la capacidad de conectarnos con otras personas y crear confianza y ganar confianza”.
De hecho, más que cualquier habilidad técnica o empresarial, la habilidad más importante que se debe tener es poder ganarse la confianza de otras personas, que proviene de la autenticidad, el trabajo en equipo, el compartir y tener un alto coeficiente emocional, explicó.
“¿Creo que la IA puede fingirlo? Sí. ¿Creo que las personas aceptarán la falsificación de la IA, al menos durante los próximos 50 años? No. Así que eso es suficiente tiempo para que sus hijos sobrevivan y descubran el próximo paso para sus hijos”, dijo Lee.
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