Durante casi un mes, miles de georgianos, especialmente jóvenes, han estado protestando un proyecto de ley sobre “agentes extranjeros”. Inspirada en la ley rusa de 2012, la nueva legislación requeriría que las ONG y los medios de comunicación se registren como agentes de influencia extranjera si el 20 por ciento o más de su financiamiento proviene del extranjero. Los oponentes temen que el proyecto de ley sea utilizado para reprimir la disidencia política como en Rusia. A pesar de las amplias manifestaciones, el partido gobernante de Georgia está decidido a aprobar la ley, que se está debatiendo el martes en el parlamento en su tercera y última lectura. Taline Oundjian y Régis Genté informan.
Link de la fuente p>