El regulador financiero líder de Gran Bretaña enfrentó el lunes una creciente presión para abandonar su plan de “nombrar y avergonzar” a empresas bajo investigación, con afirmaciones de que la medida socavaría la City de Londres y mancharía injustamente reputaciones.
Bim Afolami, ministro de la City, dijo que el Tesoro estaba en conversaciones con la Autoridad de Conducta Financiera sobre su plan, en medio de crecientes preocupaciones en círculos gubernamentales de que el regulador está socavando la competitividad.
Mientras tanto, parlamentarios senior escribieron a Nikhil Rathi, director ejecutivo de la FCA, advirtiendo que el plan podría dañar a la City y a individuos, acusando al regulador de no evaluar su probable impacto.
La FCA está consultando sobre una propuesta para nombrar a empresas bajo investigación con mayor frecuencia y en una etapa mucho más temprana, con el objetivo de crear más transparencia y aumentar el efecto disuasorio.
El regulador ha causado creciente irritación en círculos gubernamentales, ante el temor de que la City esté perdiendo terreno frente a centros financieros rivales como Nueva York. Un diputado conservador senior dijo: “La FCA es un peso muerto masivo para la competitividad del Reino Unido.
“Sé que los ministros del Tesoro intentaron controlarlos, pero hay miles de ellos ideando nuevas formas de cargar a las empresas. Cuando se escriba la historia del declive de las cotizaciones en Londres, en lugar de RIP, dirá FCA”.
Afolami dijo que la FCA había elaborado los planes de forma independiente, pero señaló: “Estamos dialogando tanto con la FCA como con la industria a medida que se desarrollan las propuestas, en particular para asegurarnos de que se consideren adecuadamente los posibles impactos en la competitividad”.
Mientras tanto, el comité de regulación de servicios financieros de la Cámara de los Lores escribió a Rathi para exigir respuestas sobre el plan, incluida la cuestión de la ausencia de un análisis coste-beneficio. Se espera que el comité inicie una investigación sobre la regulación de la City el próximo mes.
Los pares dijeron que la propuesta corre el riesgo de “tener un efecto desproporcionado en las empresas nombradas en investigaciones” y de poner en peligro la integridad general del mercado, incluso a través de “impactos injustificados en los precios de las acciones”.
Lord Michael Forsyth, ex ministro del gabinete conservador, dijo que el plan podría tener “un impacto altamente negativo” en las empresas nombradas como bajo investigación que posteriormente fueran absueltas.
“A pesar de no haber hecho nada malo, esas empresas – y las personas asociadas con ellas – corren el riesgo de ver manchada su reputación”, dijo.
Miles Celic, director ejecutivo de TheCityUK, describió la propuesta como una política de “nombrar y avergonzar” y dijo que la industria de servicios financieros se oponía a ella.
La FCA dijo en un comunicado: “Sabemos que nuestras acciones pueden influir en la productividad y, por lo tanto, en la competitividad internacional y el crecimiento. Tener mercados limpios donde se castigue la mala conducta es una parte clave para atraer a empresas que quieran operar aquí”.
El regulador no tiene la obligación estatutaria de realizar un análisis coste-beneficio sobre la propuesta porque la política no afecta sus reglas, según un funcionario de la FCA.
En respuesta a las críticas, Rathi dijo en un discurso el lunes que el regulador no está abordando la iniciativa como un ejercicio de nombrar y avergonzar.
“Algunos organismos comerciales de la City han caracterizado esto como ‘nombrar y avergonzar’ que socavaría la competitividad. Esa no es nuestra forma de pensar al respecto”, dijo Rathi al Foro de Cooperación en Regulación Digital, un foro voluntario que tiene como objetivo apoyar la cooperación entre sus miembros, según un borrador del discurso.
Rathi citó la decisión de la FCA en 2022 de emitir una advertencia sobre la empresa de criptomonedas FTX, cuyo fundador fue condenado a 25 años de prisión en Estados Unidos en marzo, antes de que se considerara alguna acción coercitiva.
La reacción adversa a la propuesta de la FCA también ha planteado interrogantes sobre cuánto servirá a los intereses propios del regulador. Al hacer públicas las investigaciones, el organismo de control se abrirá a críticas y comentarios sobre los casos, según abogados.
“Creo que hay una creciente realización de que esto no está en el interés de nadie, incluida la FCA”, dijo Nathan Willmott, socio de Ashurst que asesora a empresas en acciones regulatorias. “Al anunciar investigaciones antes, el regulador invitará a un debate sobre los méritos de cada caso, al que luego no podrá responder”.
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Los abogados también han expresado su preocupación de que una empresa quede manchada con lo que la FCA inicialmente la acusa, a pesar de que el regulador a menudo inicia sus investigaciones con un conjunto más amplio de acusaciones que las que finalmente conlleva acciones coercitivas.
Esto, combinado con el hecho de que el 65 por ciento de los casos de la FCA se cierran sin acción, socava la justificación de que la propuesta actúa como un disuasivo para la mala conducta, dicen los abogados.
La medida está fuera de sintonía con el enfoque de varios homólogos internacionales del regulador del Reino Unido, incluida la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos y el regulador financiero alemán BaFin. Ninguna agencia anuncia medidas coercitivas hasta que estén concluidas.
La FCA ha dicho que el nuevo enfoque es coherente, sin embargo, con otros reguladores, incluida la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido y la Autoridad Monetaria de Singapur, que sí nombran a empresas bajo investigación en algunas circunstancias.