Como periodista con experiencia, la continua violencia de Israel en la Franja de Gaza y sus restricciones al acceso de periodistas a la región han generado críticas. Nuevos datos publicados el jueves sugieren que las tácticas de Israel están alimentando una “guerra de información” con incentivos perversos para los propagadores del odio y los teóricos de la conspiración.
La estimación preliminar del Comité para la Protección de los Periodistas contabiliza 95 periodistas y trabajadores de medios que han sido asesinados en Gaza desde el ataque de Hamas a Israel el 7 de octubre, y la gran mayoría de esos periodistas son palestinos. Al mismo tiempo, la decisión de Israel de evitar la entrada de periodistas internacionales ha enfurecido a activistas y a la Asociación de Prensa Extranjera.
El Tribunal Supremo de Israel, en enero, ratificó una prohibición de entrada a periodistas en Gaza impuesta después del ataque de Hamas, informó el Times of Israel; los pocos periodistas extranjeros permitidos han estado bajo escolta militar y sujetos a censura. A principios de este mes, la Knesset aprobó una ley que otorgaba al gobierno la capacidad de cerrar medios de comunicación extranjeros como Al Jazeera, con sede en Qatar.
La elección de Israel plantea “preguntas sobre lo que Israel no quiere que los periodistas internacionales vean”, señaló la Asociación de Prensa Extranjera en un comunicado el lunes.
Ese mismo día, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, dijo que la negativa de Israel a permitir la entrada de periodistas internacionales a Gaza ha creado una “guerra de información” que agrava la situación ya desgarradora en la región. “Negar la entrada a periodistas internacionales a Gaza permite que la desinformación y las falsas narrativas se propaguen”, afirmó.
La Casa Blanca respaldó ese sentimiento el jueves:
“Hemos dejado claro al gobierno de Israel que deberían permitir la entrada de más periodistas a Gaza”, dice @StateDeptSpox Matt Miller, afirmando que sería beneficioso ver lo que está sucediendo dentro.
— Alex Marquardt (@MarquardtA) 11 de abril de 2024
La guerra de Israel con Hamas, que se desató después del ataque terrorista del 7 de octubre pero que se ha convertido en una aniquilación total de Gaza, también se ha convertido en un vacío en el que los teóricos de la conspiración y los propagandistas pueden bombear desinformación y odio. Es un punto que discutí con Joy Reid y mi colega Brandy Zadrozny en “The ReidOut” el otoño pasado.
Y los nuevos datos publicados el jueves por el Centro para Combatir el Odio Digital muestran cómo los mercaderes han obtenido beneficios al difundir afirmaciones dudosas y prejuiciosas sobre el conflicto en curso. El informe se llama “Hate Pays: How X accounts are exploiting the Israel-Gaza conflict to grow and profit,” y lo puedes consultar aquí.
“Las cuentas que publican contenido anti-judío y anti-musulmán sobre el conflicto Israel-Gaza están acumulando nuevos seguidores en X a una tasa significativamente mayor desde el 7 de octubre,” dijo el comunicado de prensa del centro, “explotando los cambios en las políticas promulgadas bajo la propiedad de Elon Musk en la plataforma.”
El informe destaca la crisis que está floreciendo debido a la negativa de Israel de permitir la entrada de periodistas a Gaza. En ausencia de reporteros que puedan proporcionar detalles precisos sobre lo que está sucediendo en la región, las personas recurren a fuentes poco confiables que aprovechan la oportunidad para fomentar el odio y sembrar la división.
Este artículo fue publicado originalmente en MSNBC.com