El presidente Biden mencionó el miércoles que Estados Unidos está considerando retirar la acusación contra Julian Assange, el fundador de WikiLeaks que ha estado encarcelado en Londres durante años mientras lucha contra la extradición para enfrentar cargos en EE. UU. relacionados con la publicación de documentos clasificados.
El Sr. Biden hizo este comentario sobre el caso del editor en apuros, quien está detenido en una prisión de máxima seguridad, en respuesta a una pregunta sobre una solicitud del país de origen de Mr. Assange, Australia, para que se le permita regresar.
“Lo estamos considerando”, dijo el Sr. Biden en la Casa Blanca, donde recibía al primer ministro Fumio Kishida de Japón.
Mr. Assange ha estado encarcelado durante casi cinco años después de ser acusado por Estados Unidos con 18 cargos de violar la Ley de Espionaje por publicar miles de documentos detallando operaciones militares secretas e inteligencia diplomática, así como revelaciones sobre el número de civiles muertos en las guerras de Irak y Afganistán.
Su caso ha mantenido la atención internacional y ha sido condenado por grupos de derechos de la Primera Enmienda.
Mr. Assange ha combatido los esfuerzos de EE. UU. por extraditarlo. Las acusaciones podrían resultar en una condena de hasta 175 años de prisión, aunque abogados de EE. UU. han dicho que lo más probable es que sea condenado a cuatro a seis años.
En febrero, el parlamento de Australia aprobó una moción pidiendo la liberación de Mr. Assange, y el primer ministro Anthony Albanese dijo que había discutido el asunto en una reunión el otoño pasado con el Sr. Biden.
Al respaldar la moción, el Sr. Albanese dijo al parlamento australiano “es apropiado que expresemos nuestra opinión muy fuerte de que esos países deben tomar en cuenta la necesidad de concluir esto”.
El mes pasado, el Tribunal Supremo de Londres dictaminó que Mr. Assange no podía ser extraditado inmediatamente a Estados Unidos hasta que se cumplieran ciertas condiciones.
El tribunal le dio a Estados Unidos tres semanas “para dar garantías satisfactorias” de que Mr. Assange “puede basarse en la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos (que protege la libertad de expresión), que no se le prejuzga en el juicio (incluyendo la pena) por motivo de su nacionalidad, que se le conceden las mismas protecciones de la Primera Enmienda que a un ciudadano de Estados Unidos y que la pena de muerte no sea impuesta.”