En la fábrica de Tesla en Fremont, los trabajadores ensamblan automóviles en la línea. Foto por David Butow/Corbis via Getty Images
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El fabricante de vehículos eléctricos Tesla ha llegado a un acuerdo extrajudicial en una demanda por discriminación racista en la que un jurado federal previamente otorgó $3.2 millones en daños a Owen Diaz, un hombre negro que trabajaba como operador de ascensores en la fábrica de Fremont, California, en 2015.
El abogado Lawrence Organ, de California Civil Rights Law Group, quien representó a Diaz, le dijo a CNBC por correo electrónico: “Las partes han llegado a una solución amistosa. Los términos del acuerdo son confidenciales y no haremos más comentarios”.
La misma firma representa a empleados actuales y anteriores de Tesla en una demanda colectiva propuesta, Marcus Vaughn v. Tesla Inc., alegando que la discriminación y el acoso racista a los trabajadores negros han continuado en el fabricante de automóviles. Diaz no forma parte de esa acción judicial.
Organ dijo a CNBC por teléfono el viernes: “Se requirió un enorme coraje por parte de Owen Diaz para enfrentarse a una empresa del tamaño de Tesla. Las leyes de derechos civiles solo funcionan si las personas están dispuestas a correr ese tipo de riesgos. A pesar de que el capítulo litigioso de su vida ha terminado, todavía hay mucho trabajo por hacer para Tesla”.
Dijo: “Cuando inicié este caso, sugerí que la conducta cesaría si Elon Musk hiciera una declaración y un compromiso con sus empleados de que esto no es tolerado. No hemos escuchado eso después de siete años de litigio, un veredicto de nueve cifras y luego un veredicto de siete cifras. ¿Por qué no detiene esta conducta? Eso es lo que no tiene sentido para mí. Se supone que Tesla es la fábrica del futuro. Pero esta conducta es del pasado de Jim Crow”.
La Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo de EE. UU. también demandó a Tesla, acusando al fabricante de automóviles de violar “la ley federal al tolerar un acoso racial generalizado y continuo de sus empleados negros y al someter a algunos de estos trabajadores a represalias por oponerse al acoso”.
Tesla ha calificado las acusaciones de la EEOC como “un relato falso que ignora el historial de igualdad de oportunidades laborales de Tesla”.
Caso de Diaz
En 2023, como informó anteriormente CNBC, Diaz testificó en un tribunal federal de San Francisco que sus colegas en Tesla regularmente utilizaban epítetos racistas para denigrarlo a él y a otros trabajadores negros, lo hacían sentir físicamente inseguro en la fábrica, le decían que “volviera a África” y dejaban grafitis racistas en los baños.
Los colegas de Diaz en Tesla también dejaron un dibujo racista en su lugar de trabajo, dijo. El dibujo era una referencia rudimentaria a Inki the Caveman, un dibujo animado de la década de 1950 cuyo personaje principal es un niño negro representado con grandes labios, vistiendo un taparrabos, pendientes y un hueso en su cabello.
Durante sus juicios, Diaz relató que había animado a su hijo a trabajar en Tesla, pero luego lamentaría la recomendación porque su hijo también fue expuesto a un ambiente laboral racialmente hostil.
En su primer juicio, un jurado otorgó a Diaz un veredicto mucho mayor, incluidos daños punitivos, de $137 millones después de que él y sus abogados persuadieron al jurado de que había sufrido una grave discriminación racista y que la empresa no había tomado todas las medidas razonables para poner fin y prevenir eso y otras violaciones de derechos civiles.
Diaz y Tesla solicitaron un nuevo juicio para decidir los daños después de que el juez William H. Orrick redujera la cantidad otorgada por el jurado a $15 millones. Diaz volvió a prevalecer, asegurando el veredicto de $3.2 millones.
Elon Musk en X
El acuerdo con Diaz llega en un momento en que el CEO de Tesla, Elon Musk, enfrenta críticas generalizadas por su manejo de discursos de odio en X, anteriormente Twitter, que él posee y dirige como CTO.
Según informó recientemente NBC News, Musk ha compartido afirmaciones no verificadas sobre canibalismo en Haití este mes en X, y compartió publicaciones difamando a los migrantes haitianos como posibles caníbales.
La organización de noticias progresista MotherJones también informó que “el multimillonario de la tecnología ha estado retuiteando a seguidores prominentes de científicos raciales en su plataforma”, y “difundiendo información errónea sobre la inteligencia y fisiología de minorías raciales”.
Tesla, que carece de una oficina de relaciones públicas tradicional en América del Norte, no respondió a una solicitud de comentario.