Atletas universitarios de Utah que buscan beneficiarse de su nombre, imagen y semejanza deberán obtener la aprobación por escrito de sus escuelas para cualquier acuerdo comercial que exceda los $600 bajo un proyecto de ley que recibió la aprobación legislativa final el viernes.
La política que otorga a las universidades de Utah más control sobre las asociaciones de marketing de los estudiantes atletas, conocidas como acuerdos NIL, fue aprobada por una votación de 21-7 en el Senado estatal en el último día de la sesión legislativa de 2024 después de que la Cámara la aprobara el mes pasado con poca oposición. Ahora se dirige al escritorio del gobernador republicano Spencer Cox, quien dijo el viernes que apoya el proyecto de ley.
Bajo la medida, las universidades deberán proporcionar un reconocimiento por escrito sobre si un acuerdo NIL entra en conflicto con las políticas de la escuela o los estándares delineados en el proyecto de ley.
A partir del 1 de mayo, a los estudiantes atletas se les prohibirá promover alcohol, marihuana, substancias controladas o productos de tabaco como cigarrillos electrónicos y vapos. El juego y las apuestas deportivas también están fuera de los límites, al igual que los negocios de contenido “sexual” que pagan a los empleados por desnudez total o parcial. Los atletas no pueden promover armas de fuego que no puedan poseer legalmente.
Antes de este año, Utah se mantuvo al margen mientras más de 30 estados aprobaron legislaciones regulando los acuerdos NIL a raíz de una decisión de 2021 de la Asociación Nacional de Atletismo Universitario de levantar su prohibición para que los estudiantes atletas obtengan ganancias de su fama. Varios de esos estados han chocado en la corte con la NCAA sobre quién tiene la autoridad para regular esos acuerdos.
El Representante Jordan Teuscher, republicano de South Jordan y patrocinador principal del proyecto de ley, dijo que es hora de que los legisladores de Utah intervengan en la legislación de lo que él llamó el “salvaje oeste” de las promociones de los estudiantes atletas.
Aunque la política sitúa a Utah en línea con un requisito de la NCAA que exige a los atletas informar a sus escuelas sobre acuerdos NIL grandes, va un paso más allá al requerir que las escuelas aprueben esos acuerdos. Los opositores han argumentado que como los acuerdos NIL son entre el estudiante y un tercero, ni la universidad ni el estado deberían tener voz en ellos.
El alto valor de algunos acuerdos NIL locales se hizo evidente en diciembre de 2023 cuando los jugadores de baloncesto y gimnastas de la Universidad de Utah comenzaron a llegar a clases en vistosos nuevos Jeeps y camionetas RAM que se venden por más de $40,000. A los estudiantes se les ofrecieron vehículos arrendados a través de un acuerdo NIL con una empresa llamada Crimson Collective.
Henrie Walton, un administrador de la Universidad Tecnológica de Utah que se dirigió a la Legislatura en representación de las universidades del estado, dijo que las instituciones están “cómodas” con el proyecto de ley.
El copatrocinador del Senado de Teuscher, el senador republicano Chris Wilson de Logan, dijo el viernes antes de la votación que una disposición que hace que los acuerdos NIL ya no sean un asunto de registro público protegería la capacidad de las escuelas de Utah para competir en el reclutamiento. Como propietario de un negocio que ha negociado muchos contratos NIL, Wilson dijo que las entidades pueden ser menos propensas a participar en tales contratos si son públicos.
El gobernador estuvo de acuerdo, diciéndole a los reporteros el viernes por la noche que odia lo que los acuerdos NIL han hecho con los deportes universitarios, pero ve la necesidad de ayudar a las escuelas de Utah a mantenerse competitivas en ese panorama cambiante.
“Dado que NIL es un género de la ley de los deportes universitarios ahora, tenemos que poder participar en eso”, dijo Cox. “Nuestras universidades y escuelas … tienen que poder jugar en ese mismo cajón de arena, y estamos en una gran desventaja competitiva si otros estados no están obligados a revelar los términos de esos contratos”.
Pero los críticos del proyecto de ley dicen que la exención de registros públicos socavaría la transparencia y los esfuerzos regulatorios. La legislación anularía un fallo del Comité de Registros Estatales que dijo que los contratos NIL se convierten en registros públicos una vez que se comparten con una universidad.
“Si el gobierno va a intervenir en el negocio de regular estos acuerdos privados, el público tiene interés en asegurarse de que están desempeñando esa función regulatoria”, dijo Jeff Hunt, de la Coalición de Medios de Utah, un consorcio de medios de comunicación.
Otra oponente, la senadora Kathleen Riebe, demócrata de Cottonwood Heights que votó en contra de la medida el viernes, ha expresado su reticencia a restringir la capacidad de los estudiantes atletas de beneficiarse de sus logros después de que las universidades estatales se han beneficiado de ellos durante años.
Antes el viernes, el Presidente de la NCAA, Charlie Baker, dijo que la junta de la organización le ordenó a su personal de aplicación de la ley que detenga todas las investigaciones sobre colectivos respaldados por patrocinadores u otros terceros que hagan acuerdos NIL con atletas de la División I. El movimiento llega una semana después de que la NCAA perdiera otra batalla legal en la cual un juez federal en Tennessee temporalmente prohibió que la organización haga cumplir una regla que prohibía a terceros pagar a reclutas para que asistieran a una escuela en particular.
Las nuevas políticas de la NCAA aprobadas en enero alientan a los atletas a reportar todos los acuerdos NIL para que la organización pueda construir su propia base de datos, lo que dice mejoraría la transparencia mientras ayuda a los estudiantes a tomar decisiones informadas.
La NCAA, que representa alrededor de 1,100 escuelas y más de 500,000 atletas, también quiere compilar un registro de agentes y compañías que trabajan con estudiantes atletas para protegerlos mejor de prácticas comerciales predatorias.