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La inflación en Estados Unidos cayó al 2.4 por ciento en el año hasta enero, según la métrica más seguida por la Reserva Federal, respaldando las expectativas de recortes de tasas más adelante este año.
Los datos del jueves sobre los Gastos de Consumo Personal, la medida preferida por el banco central de Estados Unidos para evaluar las presiones de precios, coincidieron con las expectativas de los economistas de un 2.4 por ciento en una encuesta de Bloomberg.
La caída desde la tasa de diciembre del 2.6 por ciento respalda las expectativas de que la Fed recortará las tasas de los actuales máximos de 23 años alrededor de la mitad de este año.
La tasa mensual de PCE en enero fue del 0.3 por ciento.
“Este fue un número benigno”, dijo Peter Tchir, jefe de estrategia macro en Academy Securities, un banco de inversión. “Hubo preocupación en el mercado de que esto iba a ser más caliente de lo esperado, pero no se materializó.”
Los futuros del S&P 500 subieron modestamente después de los datos, un 0.3 por ciento. La rentabilidad de los bonos del Tesoro a dos años, que se mueve según las expectativas de tasas de interés, cayó por la noticia, dejándola un 0.01 puntos porcentuales más baja en el día en un 4.64 por ciento.
Las cifras de PCE, las más bajas en casi tres años, se comparan con un pico del 7.1 por ciento para la métrica en junio de 2022, después de la invasión a gran escala de Rusia en Ucrania.
La tasa central para PCE, que excluye cambios en los precios de alimentos y energía, también coincidió con las expectativas de un 2.8 por ciento. La medida central mensual fue del 0.4 por ciento.
Las cifras del jueves de la Oficina de Análisis Económico son diferentes al índice de precios al consumo de Estados Unidos, que aumentó un 3.1 por ciento en el año hasta enero.
La Fed no está dispuesta a reducir los costos de endeudamiento de los niveles actuales del 5.25 al 5.5 por ciento hasta estar segura de que las presiones de precios han vuelto de manera sostenible al objetivo del 2 por ciento.
Bill Diviney, economista senior de Estados Unidos en el banco holandés ABN AMRO, dijo que los indicadores líderes de inflación, como los precios de alquiler y de autos usados, “sugieren que la desinflación continuará en los próximos meses”.
Agregó: “Seguimos pensando que la inflación de PCE volverá de manera general al objetivo de la Fed para junio, cuando esperamos que la Fed comience a reducir las tasas.”