Los hospitales de Gaza han surgido como un punto focal en la guerra entre Israel y Hamas, y cada lado menciona como el otro ha involucrado a las instalaciones en el conflicto como prueba de la falta de consideración del enemigo por la seguridad de los civiles.
Durante la guerra, las tropas israelíes han entrado en varios hospitales, incluyendo el Hospital Qatari, el Hospital Kamal Adwan y el Hospital Especializado Al-Rantisi para Niños, en busca de armas y combatientes. Pero el Hospital Al-Shifa ha tomado una importancia particular ya que es la mayor instalación médica de Gaza, y debido a las afirmaciones de alto perfil de Israel de que los líderes de Hamas operaban un centro de comando y control debajo de él. Mientras tanto, Hamas y el personal del hospital insistieron en que era solo un centro médico.
El valor de Al-Shifa como objetivo militar no fue inmediatamente claro después del ataque del 15 de noviembre, incluso después de que el ejército israelí publicara un video del túnel que se usó para crear el modelo 3D. Pero la evidencia examinada por The New York Times sugiere que Hamas usó el hospital para ocultarse, almacenar armas en él y mantener un túnel subterráneo fortificado debajo del complejo, abastecido con agua, electricidad y aire acondicionado.
Documentos de inteligencia israelíes clasificados, obtenidos y revisados por The Times, indican que el túnel tiene al menos 700 pies de longitud, el doble de lo que el ejército reveló públicamente, y que se extiende más allá del hospital y probablemente se conecta a la red subterránea más grande de Hamas.
Según imágenes clasificadas revisadas por The Times, los soldados israelíes encontraron búnkeres subterráneos, dormitorios y una habitación que parecía estar cableada para computadoras y equipo de comunicaciones a lo largo de una parte del túnel más allá del hospital, cámaras que no eran visibles en el video publicado por el ejército israelí.
El ejército israelí, sin embargo, ha luchado por demostrar que Hamas mantenía un centro de comando y control debajo de la instalación.
Los hospitales están protegidos por el derecho internacional, incluso si prestan atención médica a combatientes, pero su uso para otros actos que son “perjudiciales para el enemigo” puede convertirlos en objetivos legítimos para acciones militares. Pero cualquier acción debe sopesar la ventaja militar esperada con el daño esperado a los civiles.
Dado su tamaño e historia, el control de Al-Shifa fue siempre un objetivo más importante para el ejército israelí que las otras instalaciones más pequeñas. Israel también publicitó evidencia que dice muestra que Hamas escondió combatientes entre los enfermos y heridos y mantuvo rehenes en las instalaciones.
Mientras tanto, los oficiales de Hamas han acusado al ejército israelí de plantar pruebas en los hospitales. Hamas y las autoridades de Gaza no han refutado directamente la evidencia presentada por Israel.