El presidente de Senegal, Macky Sall, ha pospuesto las elecciones de este mes después de recibir quejas debido a que a docenas de candidatos se les negó la posibilidad de postularse.
El presidente de dos mandatos, quien reiteró que no buscará la reelección, no fijó una nueva fecha.
En medio de la controversia, un consejo constitucional impidió que varios aspirantes, incluidos algunos políticos influyentes, se postularan.
El Sr. Sall dijo que “estas condiciones turbias podrían dañar gravemente” las elecciones.
Agregó que comenzaría “un diálogo nacional abierto… para crear las condiciones para unas elecciones libres, transparentes e inclusivas en un Senegal pacífico y reconciliado”.
Una organización de influyentes clérigos islámicos advirtió en contra de posponer la votación, alegando que esto podría desestabilizar la nación.
La decisión de posponer la elección es sin precedentes en un país que es considerado una de las democracias más estables de la región de África occidental.
Veinte candidatos habían sido incluidos en la lista final, pero entre los más prominentes que fueron excluidos de la votación original, programada para el 25 de febrero, se encontraba el político de oposición Ousmane Sonko.
La figura popular fue rechazada debido a una condena por difamación. Sonko, quien ha enfrentado varios casos judiciales, dijo que había sido víctima de una campaña para impedirle postularse para presidente.
Karim Wade, hijo de un ex presidente, también fue excluido de participar debido a que supuestamente es ciudadano francés además de senegalés. Ha calificado la acusación de “escandalosa”, informa la agencia de noticias AFP.
Los partidarios del Sr. Wade en el parlamento cuestionaron la neutralidad de dos de los jueces en el panel que decidió sobre la lista final de candidatos.
Algunos políticos han argumentado que las reglas para ser candidato no se aplicaron de manera justa, algo que las autoridades han negado.