El líder de la oposición encarcelado Alexei Navalny instó el jueves a los rusos a mostrar su protesta contra el presidente Vladimir Putin durante la votación presidencial del próximo mes votando en un horario específico el día de las elecciones.
En una declaración en redes sociales desde el penal del Ártico donde está detenido, Navalny argumentó que formando largas colas al mediodía el 17 de marzo para votar contra Putin, la gente haría “una poderosa demostración del estado de ánimo del país”. Dijo que podría ser “una protesta real de toda Rusia que no solo tendrá lugar en cada ciudad, sino en cada distrito de cada ciudad”.
Putin casi seguramente ganará su quinto mandato en el cargo en las elecciones debido a su estricto control sobre el sistema político, con la mayoría de los políticos de oposición en la cárcel o en el exilio en el extranjero y la gran mayoría de los medios de comunicación independientes en Rusia bloqueados.
Además, los expertos dicen que el monitoreo independiente de la votación se verá obstaculizado por el hecho de que la votación se extenderá durante tres días del 15 al 17 de marzo, y un sistema de votación en línea estará en funcionamiento en muchas regiones.
A pesar de esos obstáculos, el equipo de Navalny ha dicho que aún hará campaña en contra de Putin, y había instado a sus seguidores a votar por cualquier otro candidato. Otros grupos de oposición, entretanto, habían sugerido la idea de que los votantes acudieran a las urnas en un horario específico como muestra de desafío.
El aliado de Navalny, Ivan Zhdanov, dijo que “inicialmente esta idea parecía débil”.
“Pero luego nos sentamos y hicimos cuentas. Hay 2,058 colegios electorales en Moscú, incluso si medio millón de personas se presentan al mismo tiempo, serán 250 personas con ideas afines en cada colegio electoral, lo que ya es mucha gente en cada colegio electoral”, dijo Zhdanov en X, anteriormente Twitter.
En su declaración desde detrás de las rejas, Navalny dijo que sería una forma “completamente legal y segura” de protestar, y las autoridades no tendrán forma de contrarrestarla.
“¿Qué pueden hacer? ¿Cerrar los colegios electorales al mediodía? ¿Organizar una contra manifestación para Putin a las 10 de la mañana? ¿Tomar nota de todos los que se presentaron al mediodía y ponerlos en la lista de personas desleales? Pero la participación al mediodía es alta de todos modos, hay mucha gente, así que sería imposible distinguir a los que votan en contra (de Putin)”, añadió Navalny.
Dijo que “millones” de personas podrán participar, y “decenas de millones” podrán presenciar dicha protesta.
Las manifestaciones callejeras tradicionales en Rusia se han vuelto raras bajo leyes represivas adoptadas por el Kremlin, especialmente después del comienzo de la guerra en Ucrania en febrero de 2022. Las protestas que tienen lugar — como las que estallaron en enero de 2021 cuando Navalny fue encarcelado, o en febrero de 2022 en los primeros días de la invasión de Ucrania por parte de Rusia — suelen ser reprimidas rápidamente, lo que resulta en detenciones masivas.
Navalny está cumpliendo una condena de 19 años de prisión por cargos que él rechaza como políticamente motivados. Hasta diciembre de 2023, estaba cumpliendo su condena en la Colonia Penal No. 6 en la región de Vladimir, al este de Moscú, donde pasó meses en aislamiento. Luego fue trasladado a una colonia penal de “régimen especial” — el nivel de seguridad más alto de las prisiones en Rusia — por encima del Círculo Ártico.
En enero, se formaron largas filas en las oficinas de campaña de Boris Nadezhdin, un político de 60 años que busca postularse contra Putin con una agenda contra la guerra. Decenas de personas hicieron cola en ciudades de toda Rusia para firmar peticiones en apoyo de su candidatura, en lo que muchos comentaristas describieron como una forma segura de mostrar desafío y expresar protesta contra el Kremlin.
Sin embargo, aún no se le ha otorgado un lugar en la boleta de marzo por la Comisión Electoral Central.